miércoles, 18 de marzo de 2009

Un nuevo truco (de MariMari)

Una manera de saber cual es real mente la ropa que usas, y no engañarnos a la hora de arreglar el closet es tener la ropa separada por tipos, la de playa, la de la estación fría, la de eventos especiales (yo por ejemplo tengo al final del closet el vestido de bautizo, el de primera comunión y el de novia de Marimari, bien envueltos y estos no entran en esta historia). etc. Pero la ropa normal, la que se supone que usamos a diario y los fines de semana y en las fiestas debemos colgarlos al revés, es decir, con el abierto del gancho hacia uno, si de la manera incorrecta como es difícil de sacarlos, así lo haremos con toda nuestra ropa colgada.
Cada vez que regresemos algo al closet después de haberlo usado debemos colgarlo bien, es decir al revés de como tenemos los otros ganchos.
Dentro de 3 o 6 meses observemos la cantidad de ganchos que siguen mal puestos, esta es la ropa que debemos retirar del closet y razonar porque no nos la ponemos, muchas veces puede ser algo tan sencillo como que tiene el ruedo descosido o el cierre no funciona y se soluciona rápidamente antes de reingresarlo al closet y volver a ponerlo a prueba, otras veces la prenda no tiene remedio o no nos gusta o nos queda mal y siempre habrá otra persona que la necesite, por lo tanto a la bolsa de caridad y directo a llevarla y no arrinconarla hasta que pase a ser parte de la decoración y no la veamos.
Me parece una gran idea y es una manera de empezar sin tener la horrible sensación de que perdemos algo que podríamos usar.
Recuerda: arreglar el closet es arreglar la mente.
Piensa positivo: siempre tendrás lo que necesitas y más.
Abre espacio para cosas nuevas, para nuevas experiencias y nuevas sensaciones, mueve la energía a tu alrededor, la mejor manera empezando por lo más íntimo tuyo: tu mesa de noche y tu closet.

El diario quehacer del hogar, es el único trabajo que sólo se nota, cuando no esta hecho.